Situado en el margen derecho del río Guadalquivir se encuentra la antigua Cartuja de Santa María de las Cuevas fundada por el arzobispo de Sevilla Don Gonzalo de Mena en 1400 sobre una antigua ermita franciscana. Más tarde asumió el patronazgo Per Afán de Ribera quien construyó la iglesia primitiva. La evolución del edificio fue notable pasando por numerosas reformas que le llevaron desde la primitiva ermita, más tarde Monasterio Cartujo, hasta cuartel de las tropas francesas durante la invasión napoleónica. Tras estos primitivos usos habría de ser lazareto primero y más tarde fábrica de cerámica hasta su actual uso, asumido tras ser edificio emblemático de la Exposición Universal de 1992.
Pese a su compleja historia aún se conservan in situ algunas notables obras, aunque otras como las de Velázquez o las de Zurbarán, San Hugo en el refectorio o la Virgen de las Cuevas entre otras, se conservan en el Museo de Bellas Artes sevillano.
Entre las que aún se encuentran in situ se pueden señalar los sepulcros de Pedro Enrique y de Catalina de Ribera ambos obras italianas de Antonio María Aprile da Carona y de Pacce Gazzini, los cuales tras su paso por la iglesia de la Anunciación, volvieron al Capítulo de la Cartuja para la Expo'92. También son interesantes los numerosos paneles de azulejos, algunos de ellos firmados por Niculoso Pisano. Entre la escultura conservada merecen señalarse el Calvario de Isidro de Villoldo y parte de la gran sillería realizada por Agustín de Perea y Jerónimo de Valencia.
En la actualidad se ubica en el Conjunto, el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, cuya colección pasará a ser expuesta tras la exposición "Velázquez y Sevilla". Asimismo, el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo tiene programadas diferentes exposiciones de interes dentro del mundo contemporáneo.