Obra mitad artística y mitad literaria en la que Francisco Pacheco recoge en magníficos dibujos los retratos de los principales personajes de su época: eclesiásticos, poetas, escritores y artistas. A ello añadió comentarios sobre sus vidas y elogios sobre sus méritos.
Según todas las fuentes Pacheco debió realizarlo en 1599 para uso propio y para mostrarlo a los compañeros de la Academia. La dificultad de llevar a grabados los retratos debieron impedir que el libro fuese publicado. Este permaneció en poder del artísta hasta que en su testamento, fechado en 1639, diese permiso para que fuese vendido con la condición de que no fueran separados los dibujos. Pese a ello el libro no ha llegado integro hasta la actualidad, pues tan sólo se conservan sesenta y cuatro de los ciento sesenta que debió realizar. Estos fueron publicados en edición facsimil en 1886 por José María Asensio. En la actualidad se encuentran en el Museo Lázaro Galdiano.