Su fecha de construcción se puede fijar a principios del siglo XVIII. Su programa iconográfica se desarrolla en torno a la orden agustina. En el primer cuerpo San Agustín y Santa Rita de Casia flanquean el grupo de la Sagrada Familia, que ocupa la hornacina central. Sobre las hornacinas laterales, dos cuadros, realizados en papel recortado, con una orla de flores en cuyo centro aparecen los Sagrados Corazones de Jesús y María. En el ático, en las calles laterales, dos Santos agustinos enmarcan el Calvario que ocupa la zona central. Sobre ellos, coronando el retablo, aparece un relieve de Dios Padre en actitud de bendecir con el globo terráqueo.