Este convento fue fundado por la Orden de las Madres Reparadoras y para ellas trabajaron en los diversos procesos de adaptación los tres arquitectos que veremos más adelante. En la actualidad está ocupado por las Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Inmaculada. Esta Orden se funda como tal en 1948 por la Madre María del Rosario del Espíritu Santo, natural de Almería y llegan a Jerez en la década de los sesenta de este siglo, haciéndose cargo del convento. Hoy día, la comunidad cuenta con catorce religiosas que distribuyen su vida entre la oración y el trabajo en un taller de ornamentos sagrados.