Entre las celosás de los coros alto y bajo se ubican tres grandes lienzos con molduras y flores dorados, donde se representan, en los laterales, "La entrada de Cristo en Jerusalén" y "La flagelación". Al centro, en un lienzo de mayores proporciones, aparecen dos escenas. En la inferior, dentro de un enmarque arquitectónico, la "Sagrada Familia", y en la superior, en el interior de un semicírculo, a modo de frontón, el momento de la "Anunciación del Arcángel San Gabriel a María". En este mismo lugar, pero en el muro del evangelio, se encuentra un interesante cuadro alegórico a la Eucaristía. Se trata de "Jesucristo como fuente de la vida", tema basado en una de las frases del evangelio: "Yo soy la fuente de la vida, quien bebe de mi sangre vivirá eternamente". Relacionado con la antigua decoración de la iglesia de la primera mitad del siglo XVII, es el cuadro, en tela de mantelillo, de la Inmaculada Concepción rodeada de un grupo angélico.