Atribuido a Cayetano de Acosta, el aguamanil situado en la sacristía y que actualmente sirve de lavabo, es sin lugar a dudas una de las más interesantes obras que posee la Comunidad.
Dividido en dos partes, la inferior en la que se ubica la pila resuelta con el apoyo de un sólo píe y la superior en la que ubica el frontal. Este se orna con la Inmaculada Concepción en el centro flanqueada por angelotes y rematada por un querubín de cuidada labra.